Grupo de minerales fibrosos que se encuentran en la naturaleza, con utilidad comercial actual o pasada por sus propiedades físicas y químicas. Se utiliza en la construcción como aislante, y como componente de diversos productos: tejas para el recubrimiento de tejados, conducciones de suministro de agua, mantas ignífugas y rellenos plásticos, y también embragues y forros de frenos, juntas y zapatas para vehículos. Las formas principales de amianto son el crisotilo o amianto blanco y la crocidolita o amianto azul. Otras formas son la amosita, la antofilita, la tremolita y la actinolita.

La exposición al amianto se produce mediante la inhalación de sus fibras:

• la mayoría de las veces, por el aire contaminado en el entorno de trabajo;
• el mayor nivel de exposición se produce cuando se mezcla con otras materias primas y al cortar en seco, con herramientas abrasivas, productos que contienen amianto;
• también puede producirse exposición al instalar y utilizar productos que contienen amianto, y en el mantenimiento de vehículos,
• o mediante fibras que han llegado a la casa en la ropa de quienes han trabajado con amianto.

Actualmente está prohibido el uso de amianto en la UE, pero muchos edificios siguen teniendo crisotilo friable u otros materiales que contienen amianto, por lo que sigue habiendo exposición al retirarlo o durante las operaciones de mantenimiento, renovación y demolición. El crisotilo se usa en materiales de fricción, tejidos y otras aplicaciones.