No puede recomendarse la quimioprofilaxis (prevención medicamentosa del cáncer) a una población general de personas sanas.
Antes de cualquier quimioprofilaxis hay que consultar a un médico que pueda supervisar el tratamiento. La automedicación con aspirina u otros posibles quimioprofilácticos está claramente desaconsejada, pues puede producir episodios adversos y potencialmente mortales.
Si bien se ha demostrado el efecto preventivo de la aspirina frente al cáncer colorrectal, sus indicaciones son limitadas. Un tratamiento con ácido acetilsalicílico, aun a dosis bajas, puede producir episodios adversos graves, como hemorragia digestiva alta y accidente cerebrovascular hemorrágico (más infrecuente). Por otra parte, todavía no se han establecido la dosis ni la duración óptimas de la quimioprofilaxis con ácido acetilsalicílico. Mientras no se hayan resuelto estas y otras cuestiones, conviene limitar la quimioprofilaxis con ácido acetilsalicílico y otros AINE a los pacientes con riesgo elevado de cáncer colorrectal, incluidos los que tienen afecciones hereditarias y, quizá, a los que han tenido previamente adenomas o cáncer colorrectal.