12 formas de reducir el riesgo de cáncer
Contaminantes
En el trabajo, protéjase de las sustancias cancerígenas cumpliendo las instrucciones de la normativa de protección de la salud y seguridad laboral
Hay en nuestro entorno, y también en el lugar de trabajo, miles de agentes naturales o artificiales que pueden ser cancerígenos. Muchas de ellas son productos químicos.
Para reducir la exposición a los carcinógenos es preciso combinar acciones y políticas gubernamentales (que protejan a los ciudadanos de las sustancias nocivas) con acciones y responsabilidades individuales (seguimiento de los consejos). El control de los carcinógenos presentes en el lugar de trabajo, en casa o en el medio ambiente exige ambos tipos de actuación. Los gobiernos tienen que establecer políticas y reglamentaciones (p. ej., límites de protección, zonas de seguridad, prohibición de sustancias) y controlar su cumplimiento; los fabricantes y demás industrias tienen que adaptar sus procesos a la normativa; y los empresarios tienen que instaurar medidas de protección de sus trabajadores (como los equipos de protección). Por ejemplo, la Directiva 2004/37/CE, relativa a la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes carcinógenos o mutágenos durante el trabajo, establece que el empresario tiene que evaluar con regularidad y gestionar el riesgo de exposición a los carcinógenos para prevenir la exposición de sus trabajadores, comunicar el número de trabajadores expuestos, las medidas preventivas, etc., a la autoridad competente a petición de esta, e informar a los trabajadores de cualquier exposición anormal.
También cada individuo puede aportar algo a un medio ambiente más saludable, como contribuir a reducir la contaminación atmosférica usando menos el coche. Como recomendación para prevenir el cáncer a título individual, es esencial seguir las instrucciones de salud y seguridad en el lugar de trabajo.
Otros puntos importantes son: i) los cánceres de origen profesional pueden prevenirse, lo que subraya el carácter esencial de la protección de los trabajadores, que estos tienen que hacer suya y exigir; ii) la amplia normativa vigente ha conseguido reducir la exposición a muchos carcinógenos, pero aún puede mejorarse.